viernes, 15 de febrero de 2013

Primera piedra

Terminando ya el día y la semana, una más en el Programa de Apoyo al Hábitat Rural, he decidido comenzar a poner por escrito algunas reflexiones sobre lo que hago, el medio en el que estoy y el futuro que se presenta.

En primer lugar, cabe explicar el título del Blog, que a su vez también desvela algo del espíritu que se encuentra detrás del mismo.

Probablemente muchos hemos escuchado la expresión "más pesado que un tanque a pedales" o quizá su variante "más lento que un tanque a pedales". Para mí es una forma irónica, divertida, y también bastante crítica de mirar a la gestión en el Estado. Ojo, quizá más adelante tenga la oportunidad de distinguir algunos conceptos, que al menos para mí, sirven. No es lo mismo lo político que lo público, la gestión del Estado y la gestión en el Estado, las políticas y las decisiones, etc.

Hace unos días en una clase de administración un profesor, bien intencionado, hizo una crítica al Estado. Terminó empaquetando a todos en la conocida etiqueta de burócrata. El que no es burócrata, no debería sentirse ofendido. Sin considerarme uno, aunque participando de ella (para bien o para mal, y ya habrá oportunidad para enfrentar qué es la burocracia), me sentí ofendido. No mucho, pero sí. Salí a defender mi gremio, el de los servidores y funcionarios públicos, por supuesto (no de los burócratas... ¿habrá un gremio de eso, o nunca habrá prosperado por la cantidad de papeleo que llenar?).

Aunque todos reconocemos que el Estado es un gran tanque a pedales, es necesario reconocer que hay muchas personas en su sistema que trabajan bien, que quieren hacerlo, que quieren aprender. También hay personas que no tanto. Como es obvio. Pero no podemos decir que son la mayoría. Por lo menos donde estoy, veo mucho ánimo, buena voluntad, esfuerzo.

Somos un tanque a pedales por muchas razones muy profundas, relacionadas a las tendencias más humanas. Primero podemos hablar de la autoconservación. Eso significa librarse de procesos administrativos, penales, y otros. Todo tiene que estar sellado, visado, firmado, sustentado, re-sustentado, visado nuevamente, sellado (hoy vi una Resolución Ministerial - una RM, en la jerga nuestra - , con 8 sellos, ni más ni menos). Y encima uno es responsable por 10 años.

También está la otra tendencia "natural", la desconfianza. Todos somos ladrones, corruptos, mentirosos, derrochadores hasta que se pruebe lo contrario. Pero como eso no puede estar así de legislado, las normas te llevan a eso. Un ejemplo es la temida ley de contrataciones del Estado. Comprar es dificilísimo. Te pueden objetar, resolver, declarar nulo. Se dice que cuando el Estado va arbitraje al OSCE (otra tendencia es ponerle siglas a todo: Órgano Supervisor de Contrataciones del Estado), siempre pierde. Y luego hay que buscar responsables. El que firma, pues.

Una más, muy honda, como ríos profundos, es la justificación. Todos nos tenemos que justificar. Equivocarse no es bueno en el Estado. Te hacen proceso, y estás a la merced de la Contraloría por 10 años. 10 años sin dormir tranquilo!!! De hecho, cuando entré a la función que tengo encargada estuve alrededor de 1 mes angustiado. Logré liberarme y pasar el resto de tiempo tranquilo una vez que me hice la idea de que algún error se habrá cometido. Estoy en una oficina con 60 personas. Dada la característica humana de no ser perfectos sino perfectibles, ¿cuál es la posibilidad estadística de que no existan errores? Si  hacemos cuentas simples 60 personas, 48 horas a la semana, 52 semanas...  son 149720 horas de trabajo... algún error se tiene que cometer.... y papelito manda pues.

Ya escribí demasiado. Solo quería hacer 2 acotaciones finales.

1. El post se llama primera piedra porque es algo usual en el Estado. Todo el tiempo hay colocaciones de primeras piedras. Es lo mediático. Luego viene la inauguración. Entre lo primero y segundo hay un gran trecho. Y luego viene la sostenibilidad. Ahí está el reto. En este blog es lo mismo. El reto es sostenerme en el tiempo, seguir escribiendo y compartiendo.

2. Sigo en el Estado porque creo que se puede hacer mucho desde acá. Para mucho es un ámbito de servicio, que responde a como es uno. Hoy una persona me dijo: mucha paciencia... efectivamente, hay que tener paciencia, luchar batallas importantes y tratar de contribuir a cambiar las cosas.... si se puede, con la gracia de Dios.



3 comentarios:

  1. Querido Lucas:
    Te va a ir bien, tanto con el trabajo como con el blog. Mientras nuestras decisiones se basen en lo que es moralmente bueno no tenemos de qué preocuparnos, y tú lo sabes bien.
    Ub abrazo y mis oraciones.

    ResponderEliminar
  2. Hola Lucas
    Bueno, habrá que leerte para que la sostenibilidad se haga realidad... Confío en que tu trabajo en el estado, si bien puede ser tedioso a veces, dejará una enseñanza a todos.
    Rezaremos los 6 por tí.
    Jorge Guillén

    ResponderEliminar
  3. "Escribir es terriblemente necesario y muchas veces una ofrenda liberadora" Decia un gran escritor escandinavo. Me parece un exelente espacio tu blog para sacar reflexiones muy valiosas.

    ResponderEliminar